Cultivo embrionario

En Altravita transferimos los embriones al quinto día de cultivo. La posibilidad de cultivar embriones durante cinco días hasta la fase de desarrollo de blastocisto en el laboratorio, en lugar de los tres días tradicionales, le permite a nuestro equipo de embriología identificar con mayor certeza qué embriones son realmente los mejores en cuanto a su potencial de implantación.

Cultivo de embriones en un ambiente sano

Durante la primavera de 2016, los especialistas desarrollaron e implementaron un método que permite acercar el cultivo de embriones a condiciones más fisiológicas.

En el entorno artificial utilizado en las tecnologías reproductivas para el desarrollo de los embriones antes de transferirlos al útero, las condiciones son lo más parecidas a las naturales, ya que es el factor que determina el desarrollo embrionario. El sistema de los modernos incubadores y criobancos mantiene constantes la humedad, la temperatura y otros parámetros necesarios para el desarrollo saludable de los embriones y el almacenamiento de alta calidad durante la congelación.

Entorno dinámico

Los científicos siguen trabajando para mejorar los entornos culturales. Sin embargo, hasta ahora no se conoce al cien por cien el comportamiento de los embriones in vivo, es decir, en los órganos reproductores de la madre. Es bien sabido que durante el desarrollo natural el embrión sufre vibraciones que tienen un efecto positivo en la actividad embrionaria diaria.

Esta técnica se basa en la transferencia de vibraciones musicales o de otro tipo (por ejemplo, de los sonidos corporales de la madre) a una placa de Petri con embriones.

Llamar al embrión

Llamar a su propio feto desde un dispositivo móvil es una característica adicional de este método. Se asigna un número de contacto específico a la incubadora. Marcándolo, los padres pueden llamar y transmitir sus vibraciones sonoras al embrión.

Esto no sólo es útil para el desarrollo del embrión, sino que también se convertirá en una ayuda psicológica indispensable para los pacientes que a menudo se encuentran en un estado psico-emocional deprimido debido a la falta de conexión directa con su descendencia en desarrollo. Al fin y al cabo, un estado psicológico equilibrado de los padres es un componente esencial del éxito del tratamiento. 

Por lo general, una placa de Petri se encuentra en un estado estático, permanece en silencio y en calma, sin efectos sonoros, lo que no es del todo característico del entorno natural donde se desarrollan los embriones. La embriogénesis natural va acompañada de diversas vibraciones (mecánicas, acústicas), debidas a la actividad vital de la madre.

Los científicos examinaron 1.000 óvulos de donantes que fueron divididos en dos grupos experimentales. Un grupo se desarrolló en condiciones ordinarias de incubación y el segundo fue expuesto a vibraciones sonoras de cierta frecuencia y volumen (hasta 80 decibelios). Para excluir un factor genético, en los dos grupos se utilizó el biomaterial de los mismos padres.

Los resultados del experimento demostraron que, gracias a las vibraciones sonoras, el número de embriones en fase de blastocisto aumentó un 20% y el porcentaje de éxito de la fecundación, un 6%. Estos son excelentes indicadores, dado que cada porcentaje de éxito de la fecundación es importante.

Los especialistas de los laboratorios de embriología realizaron muchos otros experimentos para acercar el microambiente artificial del desarrollo del embrión al natural. Así, se intentó cultivarlo en una superficie inclinada que simula el movimiento del embrión, como si estuviera en una trompa de Falopio. Sin embargo, estos métodos no dieron el resultado deseado, lo cuál no puede aplicarse a los efectos acústicos.